Pileco S.AC. se constituye como empresa el año 2010 y es el resultado de una idea que se estuvo gestando por algún tiempo en la mente de su fundador, Juan Carlos Carlín Bustamante, quien durante los intervalos entre sus idas y venidas al país, participó activamente en la empresa familiar CARLÍN INGENIEROS S.A., líderes en construcciones portuarias con más de 50 obras portuarias a lo largo del litoral peruano así como muchas otras obras de ingeniería civil de gran envergadura que contribuyeron a perfilar el nuevo rostro de un país emergente, predestinado a alcanzar una privilegiada posición geopolítica en la región.

No hay sino que revisar algunas de las publicaciones que hace algunas décadas hizo el Ing. José Alberto Carlín Ochoa, padre de Juan Carlos, para comprender lo acertado de su visión sobre la rica gama de oportunidades que conformaban un potencial que, entonces, parecía ignorado por la vasta mayoría. Este año 2011 acaba de concluir uno de los ramales de la carretera interoceánica, precisamente aquel que pasa por Iñapari, lugar que hizo eco a estas apreciaciones visionarias que hoy, por fin, son una realidad tangible sobre la que confiamos poder seguir edificando un futuro promisorio.

La experiencia acumulada a lo largo de años de trabajo y dedicación no sólo contribuyó a consolidar la excelente reputación que se granjeó la empresa a lo largo del tiempo en que estuvo activa, sino que arraigó una cultura de trabajo y valores que inspiraron y en los que se nutrieron un gran número de profesionales que todavía hoy siguen contribuyendo de manera decidida al desarrollo del país desde el frente que nos proporciona el rubro de la construcción.

Juan Carlos Carlín realizó estudios de ingeniería en los Estados Unidos ejerciendo allí exitosamente la profesión. A su regreso al Perú tiene la oportunidad de participar y conducir personalmente muchas de las obras desarrolladas por Carlín Ingenieros S.A. así como de tomar en sus manos brevemente las riendas de la empresa hasta que la coyuntura de diversos sucesos demandaron más y más su presencia en el extranjero lo que resultó en que los negocios en Perú sólo pudiera atenderlos de manera esporádica. Aún así, durante los periodos en que estuvo de regreso en el país, incluso cuando ya Carlín Ingenieros S.A. se había disuelto como empresa siguiendo el lamentable deceso de su padre, Juan Carlos tuvo la oportunidad de manejar de manera personal una serie de proyectos que uno a uno pasaron a engrosar el acervo de obras conectadas a este grupo humano.

Es al retorno de uno de estos viajes al extranjero cuando Juan Carlos hace un recuento del gran número de logros desperdigados e inconexos cual hitos en un historial que empezaba a dejar de mostrar un rumbo. Es durante este proceso en que observa y sopesa este enorme bagaje de conocimientos acumulado a través de años de lucha infatigable y ve con no poca tristeza al gran número de profesionales surgidos en esas canteras y cuya experiencia y eficacia empezaba a atomizarse; desdibujándose en un escenario en el que las sinergias que, en su momento, dieron cohesión, energía y enfoque a un exitoso grupo humano, se diluían dejando en su lugar un espacio baldío que no debía permitirse que siguiera creciendo. Allí y entonces surge la idea de constituir una nueva empresa que rescatara y desarrollara ese valioso potencial existente.

SOCIOS ESTRATÉGICOS

En el 2013 PILECO S.A.C. y GRUPO CORIL, reconocida Corporación Financiera peruana, establecieron una alianza de cooperación estratégica con el fin de consolidar el desarrollo de PILECO en el mercado. 

Es así que a partir de esta alianza PILECO se consolida como empresa líder en el ámbito de construcción portuaria dado que no solamente puede convocar al personal más calificado del País, sino que también cuenta con tecnología de última generación necesaria para poder competir en el mercado globalizado actual